Nocturno-BA anduvo de gira fotográfica por la ciudad de buenos Aires y alrededores y aquí les mostramos unos de los lugares imprescindible a la hora de una recorrida porteña.
La esquina de Rodríguez Peña y av. Corrientes es uno de los puntos de partida para iniciar la recorrida por
la variada oferta de espectáculos que ofrece la ciudad, como pueden ser; Teatros, cines, restoranes
y bares donde compartir unos tragos entre amigo, entre otras muchas más
propuestas que brinda “La calle que nunca duerme” como la llamaba a la av. Corrientes
en otros épocas.
No todo es diversión en la noche
En la noche de la gran ciudad también hay gente que trabaja, cuando una buena parte de los porteños están durmiendo.
En esa noche que salimos de recorrida nos encontramos, sobre la avenida Córdoba una cuadrilla de mantenimiento de luminarias, que iba reparando y pintando las columnas que iluminan esta arteria; Que nace en Puerto Madero y cruza toda la cuidad pasado muy cerca de los bares y discotecas que están abiertos hasta las cinco de la mañana.
De Regreso a casa...
Cuando estamos en el micro centro
de la ciudad de Buenos aires es muy fácil encontramos con pequeños comercio polirubros,
en donde se puede conseguir todo lo que uno busque. Pero a medida que nos
alejamos del ruidoso centro, se pone un poco más difícil de encontrarlos. Con una fisonomía diferente a la que presentan en
la gran ciudad, los kioscos de barrio, son igual o tal vez más nutridos de
productos, como los más elegantes de las principales avenidas. Incluso, aun que
no está permitido, en algunos se pueden conseguir bebidas alcohólicas, durante
toda la noche.
Por ultimo de regreso a casa nos encontramos con este hombre que todas las noches trabaja limpiando en la estación de Avellaneda. Un lugar que cambia completamente su apariencia sin toda esa gente que transita diariamente, por ese lugar para tomar el tren e iniciar sus actividades cotidianas. este señor que humildemente nos pidió que no le sáquenos fotos de muy cerca como para que no lo reconozcan. Nos contó que a esa hora la estación es otro mundo, con anécdotas muy coloridas y no tanto, que publicaremos en breve.